El cuerpo humano sigue evolucionando, científicos descubren que hemos desarrollado una nueva artería en el antebrazo
Investigadores de la Universidad Flinders y de Adelaide, en Australia, han deducido que el cuerpo humano sigue evolucionando y eso ha quedado demostrado con un reciente descubrimiento científico en torno a la aparición de una arteria extra.
Un poco de referencia médica para entender una nueva maravilla del cuerpo humano. Por lo general, cuando los seres humanos nos estamos formando en el útero, tenemos una arteria adicional.
Se trata de la arteria mediana, eje del descubrimientoque aboga por la ratificación que el cuerpo humano aún sigue evolucionando, que corre temporalmente por el centro de nuestro antebrazo, desde el nacimiento, y tiende a desaparecer alrededor de las ocho semanas de vida.
Formado en etapas muy tempranas de desarrollo, el propósito de la arteria en cuestión es “alimentar” sangre a las manos en crecimiento del feto, y cuando ésta retrocede, las responsabilidades se transmiten a las arterias radial y cubital.
El descubierto reciente radica en que cada vez más de nosotros estamos reteniendo esta arteria adicional, lo que sugiere que los humanos todavía están en medio de su evolución como especie.
Así es que los investigadores australianos efectuaron un estudio de las extremidades superiores de 78 ciudadanos mayores de 51 años, y estos son los hallazgos, publicados aquí.
Una de las investigadoras, Teghan Lucas, explicó que se han realizado investigaciones en esta arteria en particular desde el siglo XVIII y que se ha vuelto cada vez más común desde entonces y son cada vez más personas retienen la vena.
Descubren que el cuerpo humano sigue evolucionando
De esta manera se puede decir que el cuerpo humano sigue evolucionando, en lo que los especialistas de Flinders y Adelaide, denominan una microevolución.
“La prevalencia fue de alrededor del 10% en las personas nacidas a mediados de la década de 1880 en comparación con el 30% de las nacidas a fines del siglo 20, por lo que es un aumento significativo en un período de tiempo bastante corto en lo que respecta a la evolución”, aclaran.
Si bien esta noción de tener más sangre puede ser útil cuando se trata de salud y movilidad, profundiza el análisis, también conlleva un riesgo de síndrome del túnel carpiano, muy conocido en los tiempos que corren.
Así es que ante la posibilidad de tener tres veces el flujo sanguíneo, como el tercero representa esta arteria, indica que la selección natural favorece a aquellos que la poseen, con más torrente hacia las manos.
Lucas explica que esto habría sido el resultado de mutaciones genéticas involucradas en el desarrollo de la arteria o problemas de salud sufridos por la madre durante el embarazo, o bien ambos.
“Si esta tendencia continúa, la mayoría de las personas tendrán la arteria mediana del antebrazo para el 2100″, añade, aunque no explicó si con esto es posible comprender la tendencia de los humanos a las lesiones en el túnel carpiano.
A su turno, el autor principal del estudio, profesor Maciej Henneberg, que también es miembro del Instituto de Medicina Evolutiva de la Universidad de Zurich, Suiza, dice en la web de Flinders que “la arteria mediana ofrece beneficios porque aumenta el suministro de sangre en general y puede usarse como reemplazo en procedimientos quirúrgicos en otras partes de el cuerpo humano”.
Agrega que se trata de “la microevolución en los humanos modernos y la arteria mediana es un ejemplo perfecto de cómo todavía estamos evolucionando porque las personas nacidas más recientemente tienen una mayor prevalencia de esta arteria en comparación con humanos de generaciones anteriores”.
Otros ejemplos de cambios en la anatomía humana con el tiempo incluyen la prevalencia de la espina bífida oculta (apertura del canal sacro), conexiones anormales de dos o más huesos en los pies, y el aumento de la ausencia de muelas del juicio.