Conoce quienes son las estrellas de hollywood que mas contaminan por usar sus aviones particulares

La crisis climática es culpa de los más ricos. Es una afirmación a la que constantemente se recurre cuando se habla de los excesos de las celebridades y magnates, aunque para muchos el problema es mucho más grande que eso, algo hay de cierto en ello. Prueba de ello es que algunas personas adineradas gustan de viajar en jet privados distancias muy cortas, lo cual contamina en grandes cantidades.  

En las últimas semanas se ha hablado de los recorridos cortos hechos por Elon Musk, el Clan Kardashian o Taylor Swfit, pues en pocos minutos emitieron tantos gases de efecto invernadero como una persona común en un año. Lo que más ha indignado es que a veces lo presumen hasta en redes sociales. 

Sobre sus prácticas hay datos, recopilados por un rastreador internacional y recientemente la agencia de marketing británica Yard hizo un listado sobre la magnitud de las acciones individuales de los famosos.https://d-1574061044910536673.ampproject.net/2208121708000/frame.html

Huella de carbono, es un problema mundial

De acuerdo con el sitio de la Federación Europea de Transporte y Medio Ambiente, los vuelos en jets particulares tienen un impacto en el medio ambiente. “En solo una hora, pueden emitir dos toneladas de CO2. La persona media en el transcurso de todo un año”, sostiene.https://d-1574061044910536673.ampproject.net/2208121708000/frame.html

“Uno de nuestros informes encuentra que los aviones privados son de 5 a 14 veces más contaminantes que los aviones comerciales (por pasajero) y 50 veces más contaminantes que los trenes”, se lee en una entrada de su página. A pesar de las consecuencias, este hábito no está sujeto a alguna sanción o regulación. Andrew Murphy, Director de Aviación de Transporte y Medioambiente, aseguró que:

“Los políticos deben comenzar a gravar urgentemente los aviones personales propulsados por combustibles fósiles y prohibir su uso para 2030. Los ingresos recaudados de los súper ricos podrían invertirse en tecnología más ecológica”.

Celebridades contaminantes 

Esta semana se supo que el jet de Elon Musk voló de San José a San Francisco (56 kilómetros), en un trayecto que duró un total de nueve minutos. Además, también trascendió que un jet que pertenece a Steven Spielberg ha registrado 16 viajes que han quemado mucho combustible, aún cuando el director se ha dicho muy preocupado por el medio ambiente. Sin embargo, estas dos figuras están lejos de ser las más contaminantes, según la agencia Yard. 

Entre las que más contaminan están la hermana menor de Kim Kardashian, Kylie Jenner, ha sido etiquetada como una “criminal del clima” por repetidos viajes de corta distancia en su avión de 70 millones de dólares. También la cantante Taylor Swift, aun cuando ha sido declarada la cantante más “sustentable”. En esa lista también está la conocida Oprah Winfrey.

En esa lista, recogida por el portal Daily Mail, también se encuentran: 

Mark Wahlberg: 

• VUELOS REALIZADOS: 101 este año.
• VUELO MÁS CORTO: Nueve minutos (Los Ángeles a Van Nuys, California).
• CO2 EMITIDO: 3 mil 772,85 toneladas, 538.9 veces más que una persona promedio.

Kim Kardashian:

• VUELOS REALIZADOS: 57 este año.
• VUELO MÁS CORTO: Diez minutos (Van Nuys a Camarillo, California).
• CO2 EMITIDO: 4 mil 268.5 toneladas, 609. 8 veces más que el promedio de la persona.

Tom Cruise:

• VUELOS REALIZADOS: 20.
• VUELO MÁS CORTO: 12 minutos (Shannon a Killarney, Irlanda).
• CO2 EMITIDO: 149.6 toneladas, 21.4 veces el promedio de la persona.

¿Qué alternativas hay para evitar esto?

En el informe “Aviones privados: ¿pueden los súper ricos sobrealimentar la aviación de cero emisiones?”, citado en la web de la Federación Europea de Transporte y Medio Ambiente, hacen varias recomendaciones para evitar que los súper ricos sigan con estas prácticas dañinas que terminan perjudicando al mundo entero y a las poblaciones más vulnerables. Estas son las tres que más destacan:

1. Para 2030, los reguladores solo deberían permitir el uso de hidrógeno verde o aviones eléctricos para vuelos en trayectos de menos de 1000 kilómetros. 
2. Si no existe una prohibición, imponer una serie de cobros en relación con la distancia y el peso de los aviones, para tener en cuenta su impacto climático desproporcionado y así desincentivar los traslados cortos. 
3. Impulsar legislaciones para que empresas y los particulares se comprometan a reducir sustancialmente el uso de aviones privados y cambiarlo por medios de transporte no tan contaminantes, pero también eficaces.