El St. Regis Maldives agregará un yate de lujo a sus amenidades
Maldivas es, desde hace algunos años, el lugar preferido para los viajeros que buscan experiencias impregnadas del mayor lujo posible. Aislados en lo que pareciera la nada, aquí los visitantes se verán rodeados de las cristalinas aguas del Océano Índico, las mismas que bañan las orillas de los más selectos hospedajes, incluido el St. Regis Maldives Vommuli Resort, ubicado en una exótica isla adaptada para recibir al jet set y que muy pronto añadirá a su servicios una amenidad fuera de serie: se trata de un yate con todos los servicios incluidos.
Como si algo faltara en la basta oferta del complejo hotelero, será el próximo año cuando llegue a sus aguas un yate exclusivo para el uso de sus huéspedes, el cual cuenta, además, con nombre propio: Norma, el cual se ha transformado en su totalidad para adecuarse a las necesidades de los viajero y será el primero en su tipo en ser ofrecido como una amenidad por un hotel.
El modelo Azimit Flybridge 66, mejor conocido como Norma, recibe su nombre en homenaje al fundador de las cadenas St. Regis, John Jacob Astor IV; la historia narra que al adquirir el que fuera entonces el yate más grande del mundo, lo nombró “Nourmahal” refiriéndose al personaje de un poema; con el tiempo, acortó el nombre del buque y, de cariño, terminó siendo llamado Norma.
El nuevo Norma, que es una replica moderna de su antecesor, zarpará el próximo 2019 de las aguas del Índico, siendo el barco con las más altas especificaciones tecnológicas indicado para las azules aguas de Maldivas. Todo su interior es un conjunto del más alto diseño adaptado con el mejor mobiliario. Cuenta con tres cabinas de espacios compartidos en las que el visitante podrá desplazarse para disfrutar de los interiores y exteriores, siempre rodeado de los más impresionantes paisajes antes de arribar de nueva cuenta al St. Regis Maldives.
El yate tiene la capacidad de albergar hasta ocho pasajeros, por lo que se recomienda sea utilizado por pequeños grupos: Los afortunados a bordo podrán visitar las mejores zonas para bucear y observar la vida marina, o bien, escapaste a gozar de una cena romántica con una copa de champaña en la mano al observar el atardecer.